miércoles, 6 de abril de 2016

DESMONTANDO A SIPÁN: EL "BLUFF" LITERARIO (IV). Premios, honores y sinecuras: el mundillo cultural.


"Yo tiendo instintivamente a vengarme de los malos libros.
Soy un lector ávido y codicioso, y para mí perder tres tardes
leyendo un mal libro constituye un daño imperdonable.
No hay sarcasmo que me desquite del tiempo perdido,
por no hablar ahora de los efectos morales.
Se trata de un ajuste de cuentas legítimo."
IGNACIO ECHEVARRÍA1


Me preguntaba en los párrafos finales de mi recensión de Avisos de derrota que cómo podía considerarse noble y gentil la ideología de un escritor tan poco educada, tan poco formada, que además usa de recursos tan pobres y de tantas incorrecciones.
Y aventuraba que eso tal vez podía deberse a la seguridad que en su valía y en su escritura habían dado a Sipán los premios literarios con los que, incomprensiblemente, se había visto galardonado.
Y seguía preguntándome: "¿Qué dinámica tienen que llevar los premios literarios para que sus deficientes y reaccionarios relatos hayan sido premiados? ¿Sobre qué base se ha formado ese extraño Consejo Aragonés de la Cultura para que Sipán, prolífico pero pésimo escritor, haya sido invitado?

En cuanto a los premios literarios, los que parece haber ganado SIPÁN son su constante tarjeta de presentación: la prueba evidente de que sus relatos han sido sancionados positivamente por las personas que, por diversos motivos, componen los jurados de los certámenes literarios.

Es curioso, no obstante eso, tener en cuenta lo que dijo el propio SIPÁN sobre esos premios literarios:
"Escuchó por ahí una frase que le define. Dice así: "Me gusta la literatura, pero no los literatos. A uno le puede gustar el jamón, pero no tratar con cerdos". Por eso no escribe para los cerdos que habitan los jurados de concursos literarios ni para los escritores frustrados que consiguieron la plaza en la universidad. Escribe para sí mismo y también para los demás; eso sí, despierto y con los ojos muy abiertos."2

Es curioso también que incluso aquellos que tienen la capacidad de valorar y puntuar su escritura sean considerados con tanto desprecio. Tal vez nos hallemos esta vez ante un clasismo a la defensiva: como él, SIPÁN, no forma parte de ese élite conformada por los miembros de los jurados literarios o por profesores universitarios, él, soldado raso de la producción literaria, los denuesta.

Pero ya sabemos que, una vez plantado en una determinada posición dentro del campo sociológico de los autores (si no consagrados, sí reconocidos como tales), SIPÁN se siente con fuerza y autoridad como para denostar, ahora, a los que se hallan por debajo de él: cajeras de supermercado, vendedores, mujeres en general ("hoscos magrebíes ... como insectos palo ... vagabundos ... y carne bautizada", como dice en Concesiones al demonio3).

Es decir, gracias a sus premios y a sus publicaciones, SIPÁN se cree investido de una cierta legitimidad como para que, teniendo sus opiniones peso y valor, se sienta con el poder de calificar a la gente de su entorno.

Y es que, como nos recuerda Isabelle Touton, "el mayor sistema de legitimación simbólica sigue siendo (...) el de la publicación impresa y en editoriales de prestigio, por muy poco que gane el autor –salvo en contadas excepciones– por la venta de un libro".4 Los libros y su publicación (aunque, hélas, no en editoriales de prestigio) sirven a SIPÁN para proponerse como alguien válido, a la altura de quienes antes eran los "cerdos que habitan los jurados de concursos literarios ni para los escritores frustrados que consiguieron la plaza en la universidad", de quien un tiempo temió verse juzgado y arrinconado. Ha de ser precisamente su asumida (o imaginada, ¡vaya Vd a saber!) inclusión en esa clase la que le da fuerzas para denigrar a todo ese lumpen carente de interés sociológico y cultural –esa carne bautizada que hace crucigramas en las estaciones de autobús ...

Sobre este punto, el catedrático JUSTO SERNA opina lo siguiente: “lo que hacen como creadores o como académicos, como virtuosos del arte o de la palabra, les distancia objetivamente de la masa (...) Se les toma frecuentemente como referentes, como portavoces de ideas necesarias”.5

Tiene que ser esa legitimación la que tiene que llevar, sin duda, a que determinados personajes de la cultura consideren a SIPÁN como un igual, incluido y aceptado en el grupo sociológico de los agentes y productores culturales.6 ¿Cómo si no comprender, aceptar, asumir que todo un director de facultad, reconocido investigador en la obra de Sender y autor de una tesis doctoral sobre el autor de Chalamera (por lo tanto, poseedor de las herramientas necesarias para acometer una inspección seria de lo literario) como JOSÉ DOMINGO DUEÑAS, alabe el estilo, la escritura, la obra de SIPÁN?
"Quienes se han ocupado ya de los libros de Sipán han señalado invariablemente la pulcritud de su prosa, la cuidada construcción de sus historias, que dejan siempre una secuela de inquietud y de extrañeza en el lector (...) Avisos de derrota es, en fin, un libro de madurez, el trabajo depurado y concienzudo de un escritor que se vuelca por completo en cada historia".7

O que CARLOS CASTÁN, autor legitimado al haber logrado publicar en editoriales de prestigio, diga de su amigo SIPÁN que “el oficio, la madurez que demuestra en sus libros, la adecuación del tono y del estilo narrativo (...) hacen de él un valor actual y evidente” (la cursiva es mía).
Carlos Castán
Creo haber demostrado que no es posible calificar a SIPÁN de "escritor maduro", ni que lo sea afirmar que su tono siempre es acertado –sólo hace falta releer mis recensiones en este mismo blog. Pero, siendo así, ¿podemos afirmar que nadie se percata de las enormes insuficiencias de la obra literaria de SIPÁN como para alabarla públicamente y sin sonrojo ninguno? No es posible que sólo quien esto escribe se sienta "atacado" por el estilo infantil, ingenuo –y lo que es peor, por el discurso machista y clasista– de SIPÁN. ¿O es que CASTÁN y DUEÑAS no poseen los conocimientos suficientes como para evaluar la obra de SIPÁN en los mismos términos que lo hago yo?
Creo que ello se debe a motivaciones de otro tipo, más afines a la sociología que a las capacidades analíticas de los mencionados. Y ello porque creo que se debe más a una afinidad corporativa (en el sentido de lo expresado por Bourdieu en su estudio del campo sociológico del arte) que a un deseo por parte de esos opinadores de establecer juicios serios y fiables.

"INTELECTUALIDAD DE AMIGUETES".
En 2015 apareció en los estantes de las librerías un grueso tomo, debido a la autoría del antiguo comunista GREGORIO MORÁN, titulado El cura y los mandarines, en el que ponía de relieve la mediocridad argumentativa de gran parte de la intelectualidad española. El personaje central de ese relato era Jesús Aguirre (el "cura"), cuya promoción a la dirección de la prestigiosa editorial Taurus sólo era explicable en un clima en el que la crítica sincera estaba desterrada, en el que el amiguismo era la moneda con la que se pagaban los favores y en los que la posibilidad de no ser publicado, no aparecer en la nómina de tal revista, de no resultar jamás premiado en ningún certamen o no acceder a determinados cargos casi honoríficos era lo que detenía a los intelectuales del 2º tercio del siglo XX a no poner en tela de juicio la valía de un colega o el derecho que le asistía a disfrutar de tal o cual sinecura.

En este mismo 2016, el catedrático IGNACIO SÁNCHEZ-CUENCA ha publicado un interesante volumen en el que daba cuenta de la impunidad con la que hablaban, opinaba y, sobre todo, pontificaban determinadas personas reconocidas como incluidas dentro del establishment de los intelectuales. La desfachatez intelectual pone de relieve cómo ciertos autores y columnistas ya consagrados (de los que los ejemplos más señeros son FERNANDO SAVATER, FÉLIX DE AZÚA, PÉREZ-REVERTE, MARIO VARGAS LLOSA, ANTONIO MUÑOZ MOLINA...) se sienten con la autoridad simbólica suficiente como para lanzar gruesas aseveraciones sin necesidad ni de demostrarlas con datos ni de argumentarlas suficientemente. Opina Sánchez-Cuenca que tal vez esa actitud sea heredada del franquismo y debida a la aporía intelectual de un país en el que las posibilidades de publicación y de nombramientos en puestos visibles e influyentes se reducían a los miembros de un "cogollito" de selectos privilegiados por el régimen. Sin embargo, en una época como la actual en la que una gran generación de españoles-as ha pasado por las universidades y se ha acostumbrado al un cierto rigor científico, que determinados "gurús" opinen sin argumentar ni demostrar mediante datos parece fruto de otra época.

Es es la tesis central. Pero lo que interesa para mi argumentación es la causa expuesta por Sánchez-Cuenca por la que ninguno de esos crímenes de desfachatez intelectual es castigado –lo que sería decir: criticado en los mismos medios de comunicación y editoriales que los publican–. Y esa causa no es otra que el peligro de ser sometido al ostracismo, viendo impedido para acceder a los lugares habituales de "todo" intelectual:
"Imaginemos que alguien critica a Fernando Savater, quizá el más público de nuestros intelectuales públicos: no cabe descartar que en El País se sientan ofendidos y consideren un “empecinado” al autor de la crítica, que, a su vez, encontrará dificultades para publicar en Claves de la Razón Prác­tica, revista del grupo PRISA dirigida por Fernando Savater, pero también para que le concedan el Premio Anagrama de Ensayo, en cuyo jurado ha estado Savater muchísimos años, o el Premio Espasa de Ensayo, en el que también estuvo un tiempo, y así hasta el aburrimiento. Lo mismo cabe decir de muchos otros figurones con múltiples y largos tentáculos en los medios de comunicación y editoriales de este país."
Es decir: el miedo. Miedo a verse relegado, a verse apartado de las sinecuras de la cultureta española.
"También influye en la ausencia de una crítica abierta la red de complicidades que va tejiéndose a base de encuentros en los múltiples actos culturales que jalonan la vida pública española, ya sea en forma de conferencias, mesas redondas, cursos universitarios, o bien en forma de proyectos editoriales, manifiestos o lo que se tercie. No son tantos quienes participan en la esfera pública, así que la probabilidad de que coincidan es elevada. En el momento en que se traban relaciones personales y expectativas futuras de lo que podríamos llamar “apoyo mutuo”, la opción de la crítica pierde mucho de su atractivo."
Es decir, que, según expone Sánchez-Cuenca, es la posibilidad de dejar de pertenecer a ese selecto "cogollito" de elegidos, de privilegiados por las sinecuras que sólo están al alcance de esos intelectuales que orbitan en torno a los centros de poder político o universitario. "Complicidades", como dice el autor de La desfachatez intelectual, cadenas de favores en una red tejida a base de intercambios.
¿No hablábamos de "capitalismo de amiguetes" para referirnos a los de la Gürtel, Taula y Púnica? ¿No han llegado a hablar algunos de "política de amiguetes" en el caso del PSOE post-82 y en el del actual Podemos?
Es por ello que también es posible hablar de "INTELECTUALIDAD DE AMIGUETES".
Entre ell@s se apoyan, se favorecen para sugerir la inclusión del amiguete-a de turno en tal o cual congreso, o en tal o cual libro colectivo, para cubrir tal o cual cargo, para tal o cual subvención. Son una tupida red de unos pocos autores que, en Huesca y en Aragón tienen acceso a esos beneficios vetados para l@s que no son etiquetados como "adictos" a los amiguetes y afines a la única causa que parece motivarles: su propio interés. Es por ello también que jamás veremos a esos intelectuales –casi todos ellos orgánicos– criticar nada que provenga del centro de decisión que mayores privilegios y cargos puede ofrecer a su fidelidad: el poder político.
Umberto Eco calificaba esta práctica como habitual en la intelectualidad postmoderna, en la que se prima la estética sobre la ética y manda el interés particular:
"La existencia de una categoría de operadores culturales que producen para las masas, utilizando en realidad a las masas para fines de propio lucro en lugar de ofrecerles realizaciones de experiencia crítica, es un hecho evidente".8
Son, esos amiguetes en la intelectualidad favorecida y acrítica los INTEGRADOS en el sistema –como los denomina Eco.
Umberto Eco
Lo cierto es que un escritor relativamente joven como SIPÁN se lo ha sabido montar muy requetebién a la hora de colocarse en el cogollito. ¿Cómo? Desde su papel como editor (primero como agente editorial de la Editorial March en Huesca y, segundo, como co-responsable de la editorial Tropo) ha ido favoreciendo la inclusión de los escritores influyentes de Aragón en proyectos editoriales y, en devolución a esos favores, él mismo se ha visto beneficiado por sus amiguetes de comunes intereses. Observemos.
En 2002, SIPÁN consiguió que la Diputación de Huesca (cuya área de desarrollo estaba entonces comandada por el PAR –como el Instituto del Agua que le financió su Leyendario en 2004) publicara a March Editor un volumen sobre Huesca conserva su Magia en el que KIM MANRESA aportaba el trabajo gráfico y el altoaragonés JAVIER TOMEO (DEP) los textos. Lástima que Tomeo, residente en Barcelona, no pudiera hacer nada por Sipán para que éste publicara en Anagrama...

Esa misma editorial consiguió reunir en Historias de Loarre a "lo más granado" del panorama aragonés y altoaragonés: CARLOS CASTÁN, CRISTINA GRANDE, ISMAEL GRASA, DAMIÁN TORRIJOS, FÉLIX ROMEO, ANA MARÍA NAVALES, AMADEO COBAS, RAMÓN ACÍN, ANTÓN CASTRO y ... él mismo. En lo gráfico el fotógrafo DOMINIQUE LEYVA y el ilustrador OSCAR SANMARTÍN –con quien compartió la autoría de su Leyendario y demás opus sobre el agua "parista".

Una vez conseguida la cercanía interesada a ANTÓN CASTRO, Sipán editó en 2007 Solanar y lucernario aragonés de RAMÓN J. SENDER con Tropo Editores, en cuya presentación en el Instituto de Estudios Altoaragoneses (IEA) intervinieron JOSÉ DOMINGO DUEÑAS y Antón Castro y él mismo.9
Ese mismo año también editó Tropo Personajes de mi paisaje, de RAFAEL ANDOLZ, con la colaboración del IEA, el Ayuntamiento de Huesca y la Asociación Provincial de Librerías de Huesca. En la presentación intervinieron CARLOS CASTÁN, autor de la presentación, JOSÉ DOMINGO DUEÑAS LORENTE, director de Publicaciones del IEA, y el propio Sipán.10
Ese mismo año de 2007, Tropo reeditó el libro Museo de la soledad de CARLOS CASTÁN, de quien también publicó, en 2009, el título Papeles dispersos. Y, en coautoría con el fotógrafo antes mencionado DOMINIQUE LEYVA, el artefacto Polvo en el neón (2013).
Más interesante para el asunto que nos ocupa (la inclusión de Sipán en el Consejo Aragonés de la Cultura) es su participación en el libro colectivo Los domadores del balón. Un diario del Mundial de Fútbol de 2006 que fue editado en 2010 por la editorial Eclipsados –dirigida por NACHO ESCUÍN, quien ocupa actualmente el cargo de Director General de Cultura en el gobierno de LAMBÁN (PSOE) así como la presidencia del Consejo Aragonés de la Cultura donde ha colocado, ¡claro!, a ANTÓN CASTRO y a SIPÁN. Fidelidades e intercambios que se ven premiados.
Amiguetes: ¡cuánto nos queremos!
Una muestra de ese afecto interesado, pero que puede llegar a altas cotas de babosismo y sinvergonzonería, lo presenciamos en junio de 2015 en el CC del Matadero en Huesca, con motivo de la actuación de ELLIOTT MURPHY. Tropo (Sipán) le había publicado su primera novela, y el concierto del estadounidense era la presentación de la misma. Motivo por el cual SIPÁN subió a introducir la opera prima del músico viéndose secundado por LUIS LLES (técnico de cultura del Ayuntamiento de Huesca) y por JUANJO JAVIERRE (asesor cultural "a dedo" en la DPH, como integrante que fue de la lista municipal del PSOE –amén de amiguete de Lles y eterno enchufado de la Cultura institucional). Pues bien, los elogios que Javierre dispensó a SIPÁN fueron hasta tal punto babosos que el propio Lles (amiguete de todos) tuvo que cortar el flujo de babas porque se trataba de hablar de Murphy –y dejar de chuparse las pollas, como habría dicho uno de los personajes de Pulp Fiction.
Juanjo Javierre
Los testimonios recogidos por quien os cuenta todo esto son variados:
Pedro P.: "la verdad es que me dio vergüenza ajena presenciar ese acto de celebración entre los aprovechados de siempre...".
José S.: "sentí asco al ver cómo Javierre demostraba ser un lameculos de tres al cuarto... ¿Y además con Sipán, que es otro lameculos especializado...!"
María T.: "fue una muestra de cómo funciona la culturilla oficial: yo me quiero, tú me quieres, todos nos queremos y nos favorecemos los unos a los otros...".
Y ya, por último, Pepe J.: "dignos hijos de Luis Lles, han aprendido a medrar, a abrirse camino en el mundillo de la cultura, peloteando a quien haga falta. Si por lo menos valiese algo lo que hacen... ¡No puedo más que sentir cabreo al ver babear de esa manera al compositor de la horrible, ñoña y estúpida BSO de Que se mueran los feos...!"
¿Existe corporativismo? Yo creo que sí, ¡¡descaradamente!! Y de esta manera cumple lo que ya señalaba el antecitado sociólogo Pierre BOURDIEU en su pseudo-manifiesto “Por un corporativismo de lo universal”:
"Los productores culturales (...) estará sin la menor duda expuesta a la sospecha de corporativismo. Pero le corresponderá demostrar, mediante los fines al servicio de los cuales pondrá sus medios, duramente conquistados, de su autonomía, que se trata de un corporativismo de lo universal".11
Ahora bien, ¿lo han intentado? Lo desconozco. ¿Han conseguido disipar esa sospecha? Desde luego, no.


SINECURAS Y PREMIOS

Además de saberse presente en todos aquellas manifestaciones de la corporación, del gremio, en las que pueda no sólo defender su posición, sino defender la de los demás (quienes, a su vez, defenderán la suya), la pertenencia siquiera difusa al "cogollito" de amiguetes en la Cultura sirve a sus miembros para verse premiados por todo tipo de cargos y premios.
El primero de ellos, de entre los consguidos por SIPÁN, es la casi honorífica inclusión en el Congreso Aragonés de la Cultura, ya glosada. El segundo, aunque más difuso, puede consistir en la fácil concesión de subvenciones públicas para sus proyectos. (¿Recordáis cuando Sipán hablaba de "(mamar) de esa gran zorra que es la Administración"? Ver la primera "entrega" de este "Desmontando a Sipán...".)
El mundo de las subvenciones es ancho y proceloso, como ya debéis de imaginar y saber. En su tramitación, suele ocurrir que un grupo de "expertos" proponga la concesión de determinadas cantidades a los proyectos candidatos, lo cual puede ser corregido por el cargo de turno en beneficio o en detrimento de determinados solicitantes. Desde luego, y aunque la Ley General de Subvenciones (38/2003, de 17 de noviembre) obligue a la transparencia, os puedo asegurar que por lo menos la DGA pone todas las dificultades imaginables para cumplir con ese precepto. Por mucho que un candidato no favorecido (y por eso mismo parte interesada y con derecho a consulta por ley) pretenda consultar la documentación, la DGA sólo se lo permitirá por vía judicial. Y, una vez conseguido el ejercicio de ese derecho, ¿que encontrará?: información insuficiente sobre el cumplimiento de los criterios de adjudicación por parte de cada candidato. Si el candidato consultante rastrea el acta de la comisión de valoración y/o de evaluación de los proyectos (normalmente compuesta por miembros acreditados y con notoriedad en el "mundo de la cultura" –ya sabéis) se percatará de cuán escueta es ésta –prueba de que esos miembros acreditados se han limitado a señalar quiénes merecen y quiénes no merecen la atribución de un premio-subvención sin detenerse a estudiar los méritos verdaderos de esos proyectos.
Permitidme que os ponga un ejemplo "sangrante", en el que el "héroe" de estas reflexiones estaba presente.
El 21 de abril de 2009, la Consejera de Educación, Cultura y Deporte concedió una serie de Ayudas a la producción audiovisual para ese año. Cultura de la DGA también concedió ese mismo año Ayudas para actividades culturales de Asociaciones Culturales y Ayudas para la realización de actividades de promoción y difusión del libro y la lectura.
Todas ellas fueron motivo de la demanda interpuesta por la Asociación ALDEA de Huesca, en las que participaba con un proyecto audiovisual que tituló <<"Los lugares de Pedro Saputo"- DVD basado en la obra de Braulio Foz>> y que fue rechazado por no ser ni prioritaria y por encontrar las comisiones de valoración que aun siendo original su tratamiento, la obra de Foz había sido suficientemente trabajada. (Años después, la Orquestina del Fabirol conseguía una jugosa subvención para la edición de un CD basado en el Pedro Saputo....).
Como esa decisión ni las explicaciones pedidas y no ofrecidas por la DGA no le contentaran, ALDEA tuvo que presentarse ante los tribunales y solicitar la consulta de las cuatro cajas de documentación correspondiente a esas tres convocatorias.
Lo hallado en esa documentación fue realmente revelador. Permitidme haceros un resumen un tanto denso... (los asteriscos remiten a explicaciones posteriores):
1) se subvencionaron proyectos a entidades que no cumplían las bases. Ese fue el caso de la Catalogación de la biblioteca del Centro Aragonés de Barcelona, que la DGA subvencionó con 10.000 € a pesar de que la actividad no cumplía el requisito de realizarse dentro de Aragón.*
2) se concedió subvención a algún proyecto presentado fuera de plazo, como fue el caso de la Asociación Semana del Cine e Imagen de Fuentes de Ebro y su “14 Semana del cine”.* La Comisión de valoración de proyectos audiovisuales (Marcos Castillo, Alberto Sánchez, Luis Antº Alarcón, Juancho García y Roberto Sánchez) le concedió 20.000 €.
3) se subvencionaron proyectos sin completar la documentación requerida en las bases. Ese fue el caso del VI Festival de Música Jamaicana Lagatavajunto de la asociación El Hospizio de Lagata (Z), subvencionado con 18.000 € aun a pesar de no haber presentado un proyecto.* Eso fue gracias a la decisión tomada (se podría decir que 'a ciegas') por la Comisión de valoración de ayudas a asociaciones culturales (Marcos Castillo, Alberto Lafarga Gay, Pilar Sanmartín y MªJesús Antón).
4) que Alberto Lafarga Gay (Jefe del Servicio de Promoción Cultural de la DGA) no sólo no se abstuvo de participar en la Comisión que tenía que evaluar el proyecto presentado por su hermano (Luis Lafarga Gay), sino que concedió a la Asociación La Lonjeta de Uncastillo (Z) 5.000 € de subvención.*
5) que la Comisión del Libro se permitió cambiar sus criterios de valoración tras la publicación de éstos en el BOA. Si en las bases se decía que se subvencionaría la edición de libros ("Es objeto de la presente convocatoria ... la producción editorial de tema y autor aragonés"), el acta de esa Comisión decidió a posteriori "no entrar en la valoración de las actividades relativas a proyectos editoriales".
6) que la Comisión de ayudas a asociaciones culturales concedió subvenciones a numerosos proyectos en los que no se completó la documentación exigida en las bases. Así, a la Comisión presidida por Marcos Castillo no le importó que algunos proyectos no presentaran la preceptiva memoria descriptiva [Pro-Tamarit (Festival de Magia, 2.500 €, la Comisión no se lo requirió), Músicos de Teruel (10.000 €, fueron requeridos pero a la Comisión les bastó con el programa de su Concurso de Piano), La Albada del Pobo (5.000 €)] o que otros proyectos no incluyeran plan de financiación [Amigos de la Peña de Graus (3.000 €), Asociación Enigma (20.000 €), Grupo Andante ("Estoesloquehay", 5.000 €), Nabateros de Sobrarbe (4.000 € ¡para financiar "cenas y almuerzos" como actividad cultural!), Condearanda.com (4.000 €, actividades en Madrid)], o que otros no analizaran el cumplimiento de los criterios de adjudicación [Chicotén (1.500 €, proyecto de 1 página)].
7) que la Comisión de producción audiovisual concedió subvenciones a proyectos que no completaron la documentación exigida (por lo que muchos otros proyectos serían eliminados). Así, a la a la Comisión también presidida por Marcos Castillo no le importó que algunos proyectos no presentaran el preceptivo desglose de producción o plan de explotación [Marco Calvo Lafarga (5.000 € )] o que un mismo proyecto se desglosara en 3 partes [Ignacio Lasierra Pinto, Carlos Val Naval y Laura Sipán ("Tres Grullas I, II y III", 6.000 € cada una).
8) que señalados miembros de la Administración aragonesa tenían implicación directa en los proyectos. Así fue en el caso de el expresidente aragonés Marcelino Iglesias (miembro del Comité de Honor del Concurso de Piano A.GªAbril de Teruel, conferenciante en el Café Gijón de Madrid para CondeAranda.com), la exconsejera de Cultura MªVictoria Broto (miembro del comité del Concurso de Piano GªAbril) y el exdirector gral. de Cultura Ramón Miranda (socio de Amigos de la Peña de Graus y exalcalde de ese pueblo).
9) en cuanto al control financiero y a la justificación de los proyectos realizados al amparo de dichas subvenciones, la Ley General de Subvenciones exige que la Administración autorice expresamente la subcontratación de empresas para la realización de actividades, lo que no se cumplió en numerosísimos casos [Centro de estudios de Alagón (5.000 €), Mil y Una Historias (10.000 €), Fomento de cultura y deporte de Calamocha (5.000 €), Hospizio de Lagata (18.000 €, anulada), Enigma (20.000 €), "Estoesloquehay" (5.000 €), Pro-Tamarit (2.500 €), Sociedad Fotográfica de Zaragoza (12.000 €), Músicos de Teruel (10.000 €), Fundación Uncastillo (2.600 €), Chicotén (1.500 €), La Lonjeta de Uncastillo (5.000 €, presidida por el hermano de un vocal de la Comisión), Asociación Parola de Chistén (6.000 €), Semana del Cine de Fuentes de Ebro (20.000 €), Marco Calvo Lafarga (5.000 €), Óscar Sipán (11.000 €)], o que autorizara la modificación del proyecto [Amigos de la Peña de Graus (3.000 €), La Lonjeta de Uncastillo (5.000 €), CondeAranda.com (4.000 €, con Marcelino Iglesias en el programa), Óscar Sipán (11.000 €)]. Aún así, la DGA autorizó esos pagos, incumpliendo seriamente la Ley General de Subvenciones.

(*) Como consecuencia de la demanda de ALDEA, el Tribunal Superior de Justicia de Aragón anuló la subvención de 10.000 € concedida al Centro Aragonés de Barcelona, la subvención de 20.000 € concedida a la Asociación Semana del Cine e Imagen de Fuentes de Ebro, y la subvención de 18.000 € concedida a la asociación El Hospizio de Lagata. La subvención de 5.000 € concedida a la Asociación La Lonjeta de Uncastillo fue anulada, aunque para retrotraer las actuaciones al momento anterior a la valoración: esa Comisión votó sin la presencia del vocal y hermano del presidente de La Lonjeta y... ¡santas Pacuas! Huelga decir que el hermano en cuestión y vocal de la Comisión no fue expedientado ni sancionado ni nada... ¡Ay...!
Pero vamos a lo que nos ocupa.
SIPÁN, sí, participó en las Ayudas a la producción audiovisual con el proyecto "Il mio mondo"12,en el que el escritor figuraba como guionista y solicitante. Le fueron concedidos 11.000 €, la subvención más alta de todos los proyectos.
El estudio de la documentación reveló que la DGA no ejerció suficiente control financiero. Así, la ley fija que se debe abonar la subvención cuando se acredite el cumplimiento del proyecto, que, en el caso de SIPÁN, no se dio al existir un desfase presupuestario. La Administración habría debido supeditar la concesión a que Sipán presentara una solicitud de modificación (que no presentó), y en caso contrario reducir la cantidad abonada –lo que no se dio: la DGA incumplió en favor de Sipán.
Otro elemento en el que Sipán fue beneficiado fue la subcontratación de servicios: Sipán subcontrató una empresa (Tropo Editores, propiedad de Sipán) para desarrollar su actividad –cuando la ley estipula que no se permite que exista subcontratación con "personas o entidades vinculadas con el beneficiario" si no es con autorización –lo que no se produjo: la DGA incumplió en favor de Sipán.
El Tribunal Superior de Justicia de Aragón no anuló la subvención.
Y eso en lo relativo a 2009: la DGA ha venido convocando subvenciones a lo largo de estos años.
¿Se verá SIPÁN mayormente favorecido por las subvenciones en Cultura ahora que forma parte del Consejo Aragonés de la Cultura? Será algo que deberemos comprobar... Pero es algo previsible, ya que nuestro personajillo ha decidido (decidió hace tiempo) "vivir de esto", y las subvenciones son la única posibilidad de que alguien se convierta en profesional del ramo... Ya se lo ha montado bien, ya...!
Si Bourdieu levantara la cabeza se llevaría las manos a ella... SIPÁN tiene toda la pinta de ser un intelectual orgánico, de esos que sirven para dorar la píldora y reír las gracias a quienes toman decisiones en la Administración. Y es que SIPÁN, siendo como dice Bourdieu de los "que pretenden ocupar en él posiciones dominantes" deberían sentirse "obligados a manifestar su independencia respecto a los poderes externos, políticos o económicos; entonces, y sólo entonces, la indiferencia respecto a los poderes y los honores (...) serán inmediatamente comprendidos, incluso respetados, y debido a ello, recompensados y tenderán por este motivo a irse imponiendo cada vez más ampliamente como máximas prácticas de las conductas legítimas". 13
Pierre Bourdieu
Pero no: no hay nada de eso: no podemos considerar como "conducta legítima" la del chalaneo de premios, sinecuras y cargos de que hacen gala algunos de nuestros productores culturales. No podemos, no queremos, no debemos concedérsela a quien se va "ascendido" a determinadas honores y beneficios cuando a esa conducta ilegítima (dependencia de los poderes) le sumamos una mala praxis escritural y la exposición de valores carcas, machistas y clasistas.

Y así funciona nuestra CULTURA...
¿¡Seguiremos siendo tod@s nosotr@s tan estúpid@s como para apoyarla con nuestra presencia en sus actos, como para aceptarla sin criticarla, como para votar a los partidos que perpetúan su ejercicio?
La respuesta a estas preguntas está en cada cual...









1 Entrevista en http://www.eldiario.es/Kafka/burbuja_literaria/Ignacio-Echevarria_0_79092193.html
2 http://www.ficticia.com/autores/sipansem.html.html
3 Como dice de la gente que espera en una estación de autobuses (Onagro, Zaragoza, 2011, p.53).
4 "Introducción", en VALENCIA, Roberto, Todos somos autores y público. Convsersaciones sobre creación contemporánea. Col. "Letra Última", Institución "Fernando el Católico", Zaragoza, 2014, p.13.
5 Justo Serna, en " El intelectual culpable ", revista "Contexto", 29 de marzo de 2016. (http://ctxt.es/es/20160323/firmas/5020/intelectuales-sanchez-cuenca-critica-libro-tribunas-y-debates.htm).
6 PIERRE BOURDIEU nos enseñó que la legitimación cultural proviene de la pertenencia a un grupo sociológico determinado. Así, se considera como literaria y válida culturalmente toda producción realizada por una persona tenida por escritora –de la misma manera que resulta artístico cualquier objeto realizado y presentado por alguien tenido por artista. El campo sociológico hace el habitus, y no al revés. V. BOURDIEU, Pierre (1992), Les Règles de l’art. Genèse et structure du champ littéraire. Seuil. Paris, 1992. (Versión española: Las reglas del arte. Génesis y estructura del campo literario. Trad. de Thomas Kauf. Anagrama. Barcelona, 1995.)
7 José Domingo Dueñas, "Avisos de Derrota de Oscar Sipán", en Heraldo de Aragón (http://amigoslibro.blogspot.com.es/2009/01/avisos-de-derrota-de-oscar-sipn.html)
8 ECO, Umberto, Apocalittici e integrati, Bompiani, Milano, 1965 (versión española: Apocalípticos e integrados, trad. de Andrés Boglar, Lumen, Barcelona, 5ª edición, 1977)
9 Ver http://antoncastro.blogia.com/2010/060601-hoy-cine-y-libros-en-huesca.php
10 http://www.centrodellibrodearagon.es/asp/noticias_historico.asp?cod=476&anyo=2007&mes=6
11 BOURDIEU, op.cit., p.500.
12 Una vez corregido el error del cuento "Il mondo mio" (sic) incluido en Avisos de derrota...

13 Bourdieu, op.cit., p.99.

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