viernes, 7 de diciembre de 2007

MANIFIESTO A FAVOR DE LA CONSERVACIÓN DE LOS CINES GOYA DE ZARAGOZA Y EN DEFENSA DE UNA POLÍTICA CULTURAL DIFERENTE (documento de autoría ajena)

El colectivo de Profesionales de la Cultura de Zaragoza, con el apoyo de personas relacionadas con el mundo del audiovisual y otras que se han sumado a la iniciativa, ante la gestión de la Administración -en especial el Ayuntamiento de Zaragoza y el Gobierno de Aragón- en diversos asuntos relativos a la Cultura en Zaragoza y Aragón, y tras décadas de desidia por parte de los responsables de uno y otro signo político, que han provocado
- La destrucción del cine/teatro Fleta, patrimonio cultural y arquitectónico.
- La propuesta o aprobación de proyectos no llevados a cabo, como el destino del Palacio de Fuenclara de Zaragoza para sede de Filmoteca; la creación del Instituto Aragonés del Audiovisual; la utilización de la post-Expo como Zaragoza, ciudad de cine; etc.
- La inexistencia de locales municipales apropiados para la celebración de los certámenes cinematográficos aún existentes promovidos o apoyados por el Ayuntamiento de Zaragoza y/o el Gobierno de Aragón, y la falta de interés por contar con esas infraestructuras.
- La no celebración en 2007 de certámenes necesarios cultural, simbólica y estratégicamente, como Cinefrancia, por cuya reanudación anunciada para 2008 apostamos decididamente.
- La anunciada creación de un Festival Internacional de Cine que reemplazaría a otros ya consolidados, en lugar de sumarse a éstos.
MANIFESTAMOS
Que nuestros gestores públicos deben plantear una negociación -que debieron haber llevado a cabo hace más tiempo-, con el objeto de impedir la desaparición de los cines Goya y adquirirlos en propiedad para albergar festivales, muestras y otras actividades cinematográficas y teatrales.
Solicitamos que se realicen las actuaciones con una mayor responsabilidad, puesto que son nuestros representantes, la Cultura que gestionan no es un negocio privado, y muchas de sus decisiones son irreversibles; y un compromiso real con sus promesas, mediante proyectos tangibles y serios que no dependan de intereses variables, políticos o económicos.
Zaragoza, noviembre de 2007

(para consultar la lista de personas firmantes, entrar en http://manifiestoculturazaragoza.blogspot.com/)

jueves, 6 de diciembre de 2007

Reflexión: INFORME PISA Y COMPRENSIÓN LECTORA

publicado en aragondigital.es el 7/12/07

Que la titular de la Educación aragonesa, Eva Almunia (PSOE) diga con todo su papo que los resultados del informe PISA 2006 son buenos revela no sólo su escasa comprensión lectora de las cifras, sino un fariseísmo a prueba de bomba. Le ocurre a la consejera lo mismo que a los chavales del aula aragonesa: que leen lo que quieren –o sea: poco y sin entenderlo bien. Dar por satisfactoria la mediocridad del alumnado aragonés que muestran las cifras del informe es conformarse con bien poco.

A pesar de todo, Almunia se cura en salud y felicita a los profesores por los resultados, fruto de su ímprobo esfuerzo y buen hacer. Sin embargo, ¿cómo puede trabajar bien un profesorado precarizado, con el altísimo nivel de interinidad que se da en Aragón? Así jamás se alcanza la plena profesionalización del docente, provocando su desmotivación y, a nivel práctico, que muchas asignaturas sean impartidas por varios profesores imposibilitando así la continuidad de criterios y métodos de enseñanza.

Los resultados PISA también se podrían interpretar de otra manera: tal vez la creciente implantación de las llamadas nuevas tecnologías en el aula, tan del gusto de Almunia, no hace sino alejar a los alumnos de los libros. Eso significaría que sus pizarras digitales y sus iPods son elementos negativos en la formación del alumnado. ¡Tanto dinero tirado en medidas perjudiciales! Aunque hay que darle la razón al sentido político de Almunia: por muy malas que sean, esas medidas conforman estupendos titulares periodísticos –que es, en definitiva, lo que interesa a nuestros dirigentes.

"Lo bueno de este tipo de resultados es, precisamente, que te indican hacia donde tienes que dirigir tus políticas", razonó la consejera ante los medios. Estamos de acuerdo. Vayamos en la dirección sensata: estabilice y profesionalice al profesorado, aunque eso le cueste más dinero del que desea gastarse; con ello demostrará fehacientemente que le interesa más la educación que su propia carrera política, Sra Almunia.

(Corolario)
Probemos con otra hipótesis: ¿y si lo que de verdad interesara a nuestros gobernantes fuera, precisamente, formar analfabetos funcionales? De esa manera, del bachillerato saldrían ciudadanos incapaces de ejercer y reivindicar sus derechos –por lo tanto, más fácilmente integrables en la dinámica productiva y permeables a la política de nulo razonamiento que impera en nuestras instituciones públicas.

Un símil. En el interesante tratado de sociolingüística titulado Une politique de la langue, Michel de Certeau demuestra que la Revolución francesa creyó necesario extender el conocimiento de la lengua de Molière a toda la nación, como condición sine qua non para que toda la nación comprendiera los derechos humanos y las leyes de la República. Loable esfuerzo, digno de otros tiempo y espíritu político; tal vez hoy día nuestra clase política, frecuentemente iletrada y de escasa formación, prefiera gobernar analfabetos a enfrentarse a una ciudadanía dotada de sentido crítico –que es lo que principalmente aporta la costumbre de leer.

lunes, 3 de diciembre de 2007

Reflexión: NAVIDAD, OTRA VEZ

publicada en aragondigital.es el 22.12.07
publicada en Diario del Altoaragón el 31.12.07

Ya han encendido las ciudades sus luces de Navidad. Otro año más se va a repetir la gran kermesse comercial sobre la base de un mito católico. Todo el Estado aconfesional paralizado o casi por la celebración del nacimiento del niño-dios. Inmenso negocio para los tenderos, alentado por los Gobiernos mediante vacaciones y pagas extras.

Y como telón de fondo, la fábula que pone en escena a una humilde familia hebrea protegida por el inmenso paraguas del dios padre. Una fábula que seguirá fijando con la fuerza del mito los roles de hombres y mujeres: la mujer, madre casta y devota, reina del hogar, de profesión "sus labores"; el hombre, proveedor de bienes en el exterior para el sustento de la familia. Y, sobre todo, el dios padre: ausente trasunto del dueño de la propiedad, del señor feudal, que ejerce el derecho de pernada con impunidad medieval.

Y en medio de la escena, el niño, verdadero protagonista de las fiestas, aunque cada vez más desplazado por la publicidad adulta. El niño que interioriza el mensaje que villancicos y belenes le transmiten con terrible insistencia; el niño que crecerá con la certeza de la inamovilidad "natural" de los roles de la familia santa y primordial. Paradójica patada a la educación a la ciudadanía propalada por nuestras autoridades.

¿Para cuándo el traslado a la intimidad de los hogares cristianos de la celebración navideña? ¿cuándo dejarán los poderes públicos de invadir las calles con mensajes no señalados por la Constitución? ¿cuándo dejarán nuestras autoridades de hacerle el juego a la confesión católica? Tal vez jamás, pues es posible que bajo esa fábula subyazca asimismo la base del imaginario del súbdito, del esclavo, del ciudadano que no rechista ante las decisiones del amo; del Estado monárquico pero aconfesional, en definitiva.